Libro De Familia
La mañana de hoy ha sido completita de teléfono. A las 10 de la mañana me llamó la hija de unos amigos, pongamos que se llama Andrea para darle un nombre. Le pregunto que hace en casa, porqué no está en casa, "hice pellas", tenía exámenes, paso...Le doy mi opinión, se está jugando el curso, pero eso los quinceañeros@s no suelen darle importancia. Ella entre sollozos me relata todo de seguido: "Ya me dá igual, te quiero contar, que como estoy sola en casa aproveché para husmear en los cajones del mueble del salón y encontré el Libro de Familia de mi padres. Y...? le pregunté. Ahora sus sollozos eran llanto. "Que en el libro está la fecha de la boda de mis padres, se casaron 4 meses antes de que yo naciera. Ellos que siempre me dicen lo que debo hacer con mi gente, con mi novio, que no tenga relaciones sexuales... y mi madre iba embarazada de mi, vestida de blanco... Le respondo: " tal vez ellos no quieran que tu repitas sus mismos "fallos". No por eso te quieren menos. A menudo vamos aprendiendo de nuestras torpezas, equivocaciones. Y espero que tomes precauciones en tu vida sexual...No me dejó terminar. Acto seguido replicó: "Ya no confío en ellos. Ahora comprendo que cuando por "chorradas" discuten, siempre sale lo mismo_"si te aguanto es por tu hija"_. Siempre, depende de quien empiece la batallita soy "tu hija". Quiero ser siempre la hija de los dos. Y si no se soportan...que se separen, esto no es vida!. Que no me vengan ahora con lecciones de moralidad, teorías sobre la paternidad responsable, que ellos trabajan los dos para darme a mi un buen futuro. Yo quiero mi hoy, que no me digan que más tarde de las 3 de la madrugada no llega a casa una chica con buenos principios. Enconté cartas de ellos, hablando de sus encuentros a las 4 y 5 de la madrugada; ¿se escapaban de casa?, jamás hice yo eso. Y me sigo callando cosas ante ellos, mi padre tiene su "amiga especial que vive en Granada, le pillé el teléfono y vi todas las llamadas, se su fijo y su móvil. Mi madre se ve con su compañero de tabajo en el Hotel El Fuerte. Ya no tienen derecho a darme lecciones de nada. Bien sabe Dios que me quedé sin saber hilvanar tanta incongruencia descubierta, ya que yo sabía que cuanto me contaba era verdad. He preferido citarme con ella, para mirarla a los ojos cuando le hable. A ver como salgo de ésta, tal vez me lleve a mi hija, ella sabe que somos amigas. Hay escuelas casi de todo, pero la de padres...esa no está abierta ahora. Y todo por un Libro de Familia....
1 comentario
Rudy Spillman -
Cariños.